Doble debut
de PRESTIGE YACHTS en la próxima edición de
Cannes
y
Génova
salones náuticos previstos este mes, donde se presentarán tanto el nuevo M8 como el último F4.
2023 es un año está lleno de
novedades
para el astillero francés, una marca que lleva 30 años desarrollando y produciendo yates de lujo sin excesos, heredando su saber hacer de la valiosa actividad de construcción naval de Jeanneau.
En el próximo
Cannes Yachting Festival
PRESTIGE YACHTS estará presente en el
Vieux Port Pantiero
en
stands PAN 102
y
PAN 002
con nada menos que cinco embarcaciones, entre ellas el M8, el esperado buque insignia de la línea M-LINE, que probamos hace poco. El otro nuevo modelo, que el astillero estrenará en los salones náuticos de este año, será el F4, la nueva perla de la gama F-LINE. El 520, el M48 y el X60 también estarán disponibles para visitas y pruebas de mar, ofreciendo a los visitantes una variada oferta para entender las diferentes líneas, que, sin embargo, comparten una
lujo sin pretensiones ni excesos
basado en
espacio
y
la luz.
T
l nuevo buque insignia
M8
quiere ofrecer una experiencia náutica «diferente» a todo lo visto hasta ahora: el objetivo es reconectar con la naturaleza sin excesos,
respetando el medio ambiente
con un consumo reducido de combustible, disfrutando del crucero en su plenitud, respetando
privacidad
y vivirla con absoluta
tranquilidad.
El nuevo multicasco a motor ofrece un espacio sin igual,
270 m2 de espacio habitable,
un apartamento privado de 30 m2 que abarca el espacio entre los dos cascos y ofrece increíbles vistas al mar respetando la
privacidad del propietario
. El innovador plataforma de popa, de 4,20 m de ancho, gracias a su función móvil es perfecto para facilitar el acceso de los invitados al agua, o para ser utilizado como espacio adicional en la bañera. Como de costumbre, el diseños son personalizables según las necesidades del propietario, ofreciéndole sólo lo mejor: armonía, elegancia, paz. La atención prestada a la contaminación medioambiental hace de este M8, pues, un multicasco de última generación: su arquitectura consigue
reducir a la mitad
el consumo de combustible y la producción de CO2 en comparación con un monocasco con la misma superficie habitable; de hecho, esta embarcación, a 8 nudos, sólo consume 20 litros/hora.